Bienvenidos una semana más a la parte práctica de nuestro blog. Tras el artículo publicado el Lunes en relación a los efectos de un calendario congestionado donde analizábamos cómo el hecho de disputar 1 o 2 competiciones por semana influía y suponía un desequilibrio en los índices de carga de los jugadores en función de su participación, os traemos una propuesta práctica con la que dar continuidad a las reflexiones planteadas en el último artículo.
Una de las conclusiones a las que llegábamos tras el estudio del artículo, era la importancia de “ajustar cargas para aquellos jugadores que no juegan o juegan menos minutos de la forma más específica y cercana al juego”. Podéis acceder a muchas propuestas prácticas en nuestros 2 ebooks de “Escenarios de Máxima Exigencia” y “Circuitos Dirigidos”.
Sin embargo, reflexionábamos acerca de cómo compensar esos desequilibrios de carga, con qué tipo de estímulos y si aplicamos la suficiente especificidad a esta carga adicional para los jugadores menos habituales.
A la hora de buscar equilibrar esa carga con los jugadores con menos minutos en competición contamos con que el número de jugadores que puede participar en una sesión compensatoria es reducido, lo cual ya nos dificulta poder presentar estímulos lo más cercanos posibles a la especificidad de la competición, si entendemos la misma como una situación de 11vs11 en un espacio de unos 350 m por jugador.
Sin embargo, entre presentar estímulos de entrenamiento alejados de la especificidad y disputar un 11vs11, hay por medio muchos factores y componentes que estando presentes en los estímulos de entrenamiento presentados nos pueden ayudar a compensar esos desequilibrios de carga de manera más específica.
Por ello, con la dificultad añadida de contar con un número de jugadores reducido para ese tipo de sesiones compensatorias, cobra mayor importancia cuidar y atender los pequeños detalles que nos puedan ayudar a optimizar de una manera más específica y global el rendimiento de nuestros jugadores.
En la situación propuesta esta semana, diseñamos una activación con balón para poder realizar al inicio de sesión. En ella introducimos 3 elementos que consideramos específicos aún siendo una tarea más general y dirigida de inicio de sesión:
- Competición, y como consecuencia, mayor ritmo e intensidad en cada una de las acciones propuestas.
- Elementos coordinativos de control, conducción y pase ajustados a diferentes perfiles corporales, espacio y tiempo.
- Estímulos condicionales donde influye la trayectoria del rival para ajustar el desplazamiento propio y desplazamientos a alta velocidad.
DESCRIPCIÓN DEL EJERCICIO
Circuito de activación con finalización en porterías pequeñas:
- Los dos jugadores inician al mismo tiempo, desplazándose hacia uno de los conos, saltando la valla y desplazándose hacia el otro cono.
- Desde ahí, realizan zig-zag / cambios de dirección entre picas y van a recibir y devolver el balón del ayudante que está más cercano.
- Tras esa devolución, se van al lado contrario a recibir el balón de un compañero por un lado, para controlar y girar por el otro, y finalizar en portería pequeña. Quien antes anota, consigue 1 punto.
- Los jugadores que ayudaron con el último pase, se desplazan a alta velocidad hacia el inicio.
¡Esperamos que os guste y os recordamos que seguís teniendo disponible el último Congreso Online sobre Cuantificación de la Carga en el Fútbol!
Seguimos avanzando,
Fútbol Revolucionario.