Buckthorpe, M., Wright, S., Bruce-Low, S., Nanni, G., Sturdy, T., Gross, A. S., Bowen, L., Styles, B., Della Villa, S., Davison, M., & Gimpel, M. (2019). Recommendations for hamstring injury prevention in elite football: translating research into practice. British journal of sports medicine, 53(7), 449-456.
Bienvenidos de nuevo a nuestro blog. Esta semana, desde FR os presentamos un articulo interesante desde la perspectiva de la prevención de lesiones en el futbol, y en particular de la lesión de la musculatura isquiosural, una de las de mayor incidencia en nuestro deporte y mas estudiada por la medicina del deporte. Desde nuestro punto de vista, lo creemos muy interesante como estudio, análisis y aplicación práctica para y preparadores físicos, recuperadores, y profesionales de departamentos médicos de cualquier nivel y categoría de futbol.
El objetivo de este estudio fue analizar todos los factores de riesgo que comprenden esta lesión en el futbolista, y la interacción conjunta de todos estos indicadores. Porque es una certeza que, siendo la lesión mas estudiada e investigada en el mundo del futbol, cada temporada sigue apareciendo en multitud de casos de diferente índole y gravedad. En el estudio, los autores nos indican que parece que los factores de riesgo no actúan aislados, sino que funcionan como un complejo de determinantes. Como consecuencia en su primera aproximación cuando diseñan un programa de prevención en HSI (hamstring strain injuriy) es considerar todos los factores que puedan estar implicados desde la teoría, la evidencia científica y las experiencias anecdóticas.
En la Tabla siguiente muestran el enfoque de diferentes profesionales al considerar los contenidos del programa de prevención. Contiene la lista de factores de riesgo vinculados de alguna manera a las HSI, ya sea a través de estudios de investigación prospectivos o retrospectivos, o de evidencia anecdótica dentro de su grupo. Claramente, al diseñar un programa, uno no puede enfocarse específicamente en cada posible factor de riesgo o asignar el mismo peso a todos los factores de riesgo. En cambio, es esencial clasificar los factores en orden de importancia. Aunque los autores no nos hablan de una lista exhaustiva ni cerrada, su elaboración puede facilitar la discusión de equipos multidisciplinares en periodos como pretemporada para realizar el diseño del programa de un jugador y la asignación de recursos de prevención de un equipo.
Una de las fortalezas del articulo, es la presentación de una estrategia de HSI de cinco puntos, que contiene evidencia de investigación y experiencia clínica en un enfoque verdaderamente basado en evidencia científica, generalizable a todos los equipos de élite. Además, esto se puede escalar adecuadamente para informar la prevención de HSI en todos los niveles.
Fortalecer los músculos Isquiotibiales. Entrenamiento de Fuerza.
Tal y como vimos en nuestro Congreso de Fuerza y en charlas como la del compañero Luis Suárez, el entrenamiento de la fuerza y el hecho de fortalecer nuestros tejidos reducen la posibilidad de lesión y sobre todo aumentan el umbral de seguridad para el jugador. En su propuesta de fortalecimiento de isquiotibiales, como muchos equipos de futbol de elite los autores valoran el rol del entrenamiento excéntrico, pero no adoptan el programa de Nordic Hamstring al completo. Nos sugieren una propuesta mas holística donde se reconoce la necesidad de una función optima de los isquios (fuerza máxima y explosiva a través del perfil fuerza velocidad, equilibrando el foco en isométricos, y acciones concéntricas y excéntricas). Dentro de este entrenamiento de fuerza con equilibrio también entre la combinación de ejercicios dominantes de rodilla y cadera, nos proponen el objetivo de exponer a los jugadores al 95% de su máxima velocidad una o dos veces por semana. Por último, en este apartado nos señalan que jugadores con limitada fuera en excéntricos, o una asimetría del 10% hacia la derecha o izquierda son aquellos jugadores con mas riesgo y deben de ser monitorizados consecutivamente especialmente en su fase de return to play.
Optimizar el equilibrio del entrenamiento: de manera cuidadosa monitorear a los jugadores y asegurar una óptima estrategia de recuperación.
Quizás uno de los elementos mas importantes para la prevención de lesiones, sea el manejo de la carga del jugador. Existen ya algunas evidencias sobre la ratio carga aguda crónica puede afectar y aumentar el riesgo de lesión en isquios sobre todo en periodos congestionados de competición. La variable de High Speed Running (HSR) cuando se incrementa de manera rápida parece incrementar el riesgo de lesión. Aunque por otra parte incrementos progresivos en la ratio carga aguda crónica en esta variable, puede desarrollar la tolerancia de los jugadores a altas cargas y su resiliencia al riesgo de lesión.
Implementar un programa de estabilidad lumbopélvica a nivel de la cadera.
Existen muchas contradicciones sobre la efectividad de programas de estabilidad lumbopelvica en el análisis de las lesiones de isquios. Pero es cierto, que tal y como citan los autores, existen muchas experiencias practicas y estudios de casos que parecen optimizar al jugador y reducir su riesgo de lesión. Ejercicios de suelo, entrenamientos de Pilates en maquina o de manera individual parecen métodos útiles para aislar movimientos, retar la postura de los atletas y su habilidad de disociar movimientos y músculos además de construir una gran capacidad muscular.
Desarrollar un adecuado nivel de forma condicional de los jugadores.
Es de sobra conocido que los jugadores con mejor nivel condicional, y sobre todo en niveles de fuerza en tren inferior y de resistencia cardiovascular, son mas robustos a la hora de sufrir una lesión. Adicionalmente la implementación de un programa de fuerza ha mostrado reducción en el riesgo de lesión. Para todo ello, los autores nos indican en su propuesta, una zona objetivo de entrenamiento por encima del 85% de la frecuencia cardiaca máxima, así como ejercicios que simulen o reproduzcan los periodos de mayor intensidad del partido, para de esta forma replicar las demandas de los sistemas energéticos empleados.
Incorporar un foco sobre calidad del movimiento.
Patrones de movimiento como la sentadilla, la zancada, el salto, el aterrizaje…. son realizados en el juego en diferentes direcciones, velocidades y planos y nos deben servir para mejorar la calidad de movimiento y reducir el riesgo potencial de lesión. Practicar movimientos que nos supongan un reto en coordinación, ritmo y control neuromuscular están asociados con la habilidad para expresar y aplicar fuerza funcionalmente. Estos movimientos serian el ultimo punto agregado a los anteriores para soportar en esta propuesta ejercicios que impliquen calidad de movimiento donde se desarrollen saltos, aterrizajes, desaceleraciones y cambios de dirección.
En definitiva, como preparadores físicos encontramos en el articulo del estudio una estrategia novedosa de cinco puntos para prevenir las HSI. Los autores nos invitan a creer que las altas tasas de HSI se deben en parte a la recomendación de un enfoque simple de un solo componente para un problema multifactorial complejo. Y, por otro lado, nos sugieren a partir de sus experiencias de aprendizaje, que existe la necesidad de un enfoque holístico que traduzca el conocimiento existente sobre el riesgo de lesiones por HSI y aplique esto a un contexto futbolístico.
Desde Futbol Revolucionario creemos que sus enseñanzas pueden mejorar la practica en programas individualizados, así como una prevención grupal y/o colectiva tanto en el futbol de élite como en otros niveles del fútbol.
Seguimos avanzando…
Fútbol Revolucionario