PROGRESAR EN LA REHABILITACIÓN DESPUÉS DE UNA LESIÓN: CONSIDERACIONES DEL “CONTINUO DE CONTROL-CAOS”
Taberner, M., Allen, T., & Cohen, D. D. (2019). Progressing rehabilitation after injury: consider the ‘control-chaos continuum’.
British journal of sports medicine, 53(18), 1132-1136.
Bienvenidos de nuevo a nuestro blog. Esta semana, desde Fútbol Revolucionario os presentamos un interesante artículo que muestra la progresión llevada a cabo durante la rehabilitación de una lesión. En este estudio, se utiliza a modo de ejemplo la lesión en los isquiotibiales de un defensor central con un regreso estimado a los entrenamientos después de 6 semanas de rehabilitación.
RETORNO AL DEPORTE (RTS: Return to Sport)
La reintegración temprana al entrenamiento y al partido después de una lesión aumenta el riesgo de volver a lesionarse. Sin embargo, tener jugadores clave disponibles beneficia al rendimiento del equipo. Por lo tanto, resulta de vital importancia equilibrar estos dos componentes del proceso de regreso al deporte (RTS), combinando la evidencia y experiencia clínica para estimar este riesgo, y luego planificar y adaptar RTS en consecuencia.
Ante la falta de un modelo claro y estructurado a seguir durante la rehabilitación de lesiones en el mundo del fútbol este artículo presenta el “continuo de control y caos” (CCC). Este modelo vincula variables GPS, al tiempo que incorpora progresivamente mayores desafíos neurocognitivos perceptivos y reactivos pasando de situaciones de alto control a un alto caos.
MODELO DE CONTINUO CONTROL-CAOS (CCC)
La cuantificación y el monitoreo de la carga de entrenamiento es clave para guiar este proceso mientras se gestiona el riesgo de volver a lesionarse y los sistemas de posicionamiento global (GPS) proporcionan una medida válida de las cargas de entrenamiento externas. Sin embargo, como profesionales, debemos centrarnos tanto en los aspectos cuantitativos de la progresión de la carga como en las características cualitativas del movimiento en la competición. Esto incluye movimientos altamente variables, espontáneos e imprevistos que reflejan la naturaleza impredecible del deporte.
EL CONTINUO CONTROL – CAOS Y ANALISIS DE CARGA EXTERNA EN GPS
A partir del uso de cargas crónicas retrospectivas del jugador (GPS) junto con los tiempos estimados de curación de los tejidos se propone un marco de cinco fases con un aumento progresivo de la carga. Pudiendo ser aplicado tanto a las lesiones a corto como a largo plazo utilizando fases más cortas o más largas, especialmente porque la progresión se basa en criterios y no depende del tiempo. A su vez, también es necesario realizar pruebas de fuerza y potencia que junto a los datos del GPS permitan tomar decisiones y progresar de fase en la rehabilitación.
ALTO CONTROL
En esta primera fase la carga es inferior al 35% de la carga de partido. Los objetivos principales son: volver a correr con un alto control sobre las velocidades/cargas de carrera y bajo impacto musculoesquelético, aumentando la confianza del jugador.
Primero, se deben determinar las consideraciones clave específicas para la lesión (por ejemplo, progresión de la velocidad para la lesión de los isquiotibiales o el volumen de pases para una lesión de aductor) junto con los posibles factores individuales de riesgo de recaída. El regreso temprano a la carrera se produce mediante un aumento gradual en el volumen de carrera a velocidades más bajas, limitando así la exposición a la carrera de alta velocidad (HSR) (<60 % de velocidad máxima (EM)) y las demandas musculoesqueléticas.
El funcionamiento lineal a velocidades más bajas también minimiza las altas magnitudes de aceleración/desacelación. Las tareas deportivas, es decir, la incorporación de una pelota, se minimizan para reducir la capacidad de variación de movimiento, y la manipulación de las relaciones entre el trabajo y el descanso permite el desarrollo adecuado del sistema energético.
CONTROL MODERADO
En esta fase la carga oscila entre un 35% – 50% de la carga de partido. Entre los objetivos principales sen encuentra: introducir el cambio de dirección (COD) con la pelota, reducir el control (caos algo controlado) y progresar en la carga HSR. Se integran progresivamente los COD para reducir gradualmente el control, con demandas de aceleración/desaceleraciones determinadas por la intensidad y el volumen de los cambios de dirección. El objetivo es tanto reducir el grado de restricción de la tarea como aumentar progresivamente la distancia explosiva en relación con las demandas de entrenamiento previo a la lesión del jugador. Aumentamos las actividades lineales de HSR (60 %-70 % MS) y COD con y sin la pelota para aumentar la variabilidad del movimiento.
CONTROL mayor al CAOS
En esta fase intermedia la carga oscila entre el 40-60% de la carga de partido. Tiene el objetivo de: Introducir una estructura semanal específica del fútbol para sobrecargar las demandas específicas del juego que reflejan una transición del control al caos (inclusión de un volumen limitado de movimientos con acciones imprevistas). En nuestro marco, el desarrollo del fitness tiene un enfoque específico del fútbol que incorpora aspectos técnicos, pasando del control al aumento de los niveles de caos.
La semana está estructurada para sobrecargar los componentes del juego utilizando el fútbol “intensivo” y “extensivo” para aumentar la especificidad del entrenamiento. Entendemos que en la fase intensiva se incluyen ejercicios de pase y movimientos más reactivos, así como la aceleración/desaceleración progresiva y específica de la posición para replicar los movimientos explosivos. El fútbol extenso refleja las demandas típicas de los partidos, utilizando áreas más grandes para producir una mayor velocidad y distancia. Las tareas prescritas incorporan progresivamente correr a velocidades más altas (>65 %-80 % MS) utilizando carreras de intervalos de potencia aeróbicas para dirigirse a los sistemas de energía requeridos.
CAOS MODERADO
En esta fase la carga oscila entre el 55-70% de la carga de partido. El principal objetivo es: Aumentar las cargas de HSR aún más tanto en condiciones de control como caóticas. En esta fase, las sesiones extensas tienen como objetivo HSR (>75%MS), que incluyen cambios direccionales sutiles e incrementos progresivos en la distancia de sprint basados en las demandas relativas del partido del jugador, minimizando los “picos”: incrementos grandes/agudos en la carga. Además, incluimos ejercicios de pase y movimiento específicos en tareas de juego real para abordar la progresión de las habilidades técnicas. La distancia total semanal acumulada ahora debería haber alcanzado los niveles típicos de entrenamiento.
ALTO CAOS
Es la última fase del proceso y la carga es superior al 70% de la carga de partido. Los objetivos principales son: Devolver al jugador a las demandas relativas de entrenamiento semanal e incluir ejercicios diseñados para probar los peores escenarios (alta velocidad/alto caos). En esta fase se pone énfasis en realizar acciones técnicas en diferentes intensidades y contextos. El volumen de estas acciones debe aumentar progresivamente y será específico del jugador y la lesión.
En la fase final, se hace hincapié en el condicionamiento específico de la posición y reflejamos la intensidad del juego con volúmenes relativos a los resultados semanales de entrenamiento previo a la lesión. De esta forma, las consideraciones técnicas específicas de la lesión en cuestión (por ejemplo, la actividad de golpeo de balón por una lesión en la ingle) forman parte de nuestros criterios finales para el regreso al entrenamiento, junto con el diagnóstico de fuerza y potencia.
APLICACIONES PRÁCTICAS PARA LA RECUPERACIÓN DE LESIONES A TRAVÉS DEL CONTINUO CONTROL – CAOS
Desde Fútbol Revolucionario nos gustaría ayudaros como siempre a partir de la perspectiva científica con unas Aplicaciones Prácticas para vuestros entrenamientos, que resumimos a continuación:
- Desarrollar un perfil de rendimiento individual de cada jugador que permita conocer la demanda condicional en competición y durante el microciclo y que incluya resultados de valoraciones funcionales y/o de niveles de fuerza. Este perfil se utiliza como valores de referencia individual y permite conocer a qué valores debe llegar el jugador antes de volver a entrenar o competir.
- Durante el periodo de rehabilitación progresar en la carga de entrenamiento de forma progresiva. Prestar especial atención a los valores en las diferentes métricas de carga (Total Distance, High Speed Runing, Explosive Actions y Sprint Distance). Cada una de ellas debe seguir una progresión diferente y debe ser individualizada al jugador, sus características individuales y su lesión.
- Determinar los aspectos clave de cada lesión junto con los posibles factores individuales de riesgo de recaída para poner un mayor énfasis en ellos.
- Utilizar la cuantificación de la carga (GPS) junto con los resultados de los test de fuerza/potencia para progresar en las diferentes fases del proceso de readaptación. Teniendo en cuenta que la progresión de una fase a otra se basa en la superación de criterios establecidos y no en el tiempo.
- En las primeras fases de la rehabilitación realizar un menor volumen de entrenamiento y situaciones de mayor control. Introducir la carrera progresando en HSR e incluir los COD junto con acciones de aceleración/desaceleración.
- En las últimas fases de la rehabilitación, aumentar el volumen de entrenamiento incluyendo situaciones de “caos”. Incluir la estructura semanal específica del fútbol (fase intensiva y fase extensiva). Probar con el jugador situaciones de máxima exigencia.
RTS (RETURN TO SPORT) Y CCC (CONTROL-CAOS CONTINUUM) EN FÚTBOL
A modo de conclusión cabe destacar que, en entornos de élite, RTS es un proceso dinámico que equilibra los beneficios y riesgos para el jugador y el equipo. El CCC pasa de un alto control a un alto caos, prescribiendo cargas de trabajo en condiciones progresivamente más arriesgadas. El continuo es el producto de la evidencia científica mezclada con años de experiencia. Este marco proporciona al practicante un enfoque individualizado del RTS que integra criterios de progresión cuantitativos y cualitativos.
En el mundo del fútbol, cada vez existe mayor presión durante los procesos de rehabilitación de un deportista. Los clubes pierden dinero cada día que un jugador está lesionado y los entrenadores pierden recursos para sacar el mayor rendimiento al equipo. De esta manera, frente a toda esa vorágine se encuentra la figura del preparador físico o readaptador deportivo, persona encargada de llevar a cabo el proceso de rehabilitación día a día, pero no único responsable de que este proceso se complete satisfactoriamente.
TRABAJO MULTIDISCIPLINAR EN EL STAFF TÉCNICO
Durante el proceso de una lesión es fundamental el trabajo multidisciplinar del cuerpo técnico. Deben buscar la formula trabajando todos de la mano para que la vuelta a la competición del jugador se haga de la mejor forma posible. O ¿acaso un jugador lesionado no puede mejorar su aspecto psicológico durante una lesión? ¿y el apartado táctico? . No solo debemos poner el foco en el apartado condicional durante la rehabilitación del jugador. Con una buena comunicación y organización de todos los integrantes del cuerpo técnico se podrían mejorar aspectos tácticos con situaciones específicas en campo o incluso la comprensión del juego mediante sesiones de vídeos individualizadas.
Ante una lesión, no nos queda otra que afrontar la situación como “una oportunidad” de trabajar con nuestro deportista para volver a la competición mejor aún. Para ello, el cuerpo técnico debe trabajar en consonancia, estableciendo criterios a superar en cada una de las fases del proceso y en cada uno de los aspectos del jugador (técnico-táctico, físico, psicológico). Siendo la superación de estos contenidos más importante que el tiempo destinado a cada una de las fases.
Seguimos avanzando…
